Prohiban las reuniones
Hay un enemigo silencioso. Uno que roba horas de vida sin que te des cuenta. Que te agota sin haber hecho nada.
Que te hace replantearte tu existencia y tus decisiones.
Las reuniones.
Sí, esas horas muertas donde podrías estar trabajando, pero en lugar de eso estás mirando a una pantalla con caras serias mientras alguien dice obviedades.
🔹 «Vamos a alinearnos.» (Traducción: No sé qué hacer, así que lo discutimos hasta que se diluya la responsabilidad).
🔹 «Quedamos para hacer un brainstorming.» (Traducción: Vamos a perder dos horas sin decidir nada y terminaremos con más dudas que antes).
🔹 «¿Podemos agendar una call?» (Traducción: No quiero escribir un email, así que voy a hacer que pares todo lo que estás haciendo para escucharme decir lo que ya te podía haber dicho en tres líneas).
Si tienes más de 50, has sobrevivido a la era dorada de las reuniones absurdas.
Las de «vamos a hacer otra reunión para revisar lo que vimos en la reunión anterior.»
Las de «tendremos una quick call de solo 15 minutos» que acaba durando 45.
Y si creías que la pandemia nos había enseñado a trabajar mejor, sorpresa: lo único que hizo fue convertir las reuniones inútiles en videollamadas inútiles.
¿Cómo saber si una reunión debería ser ilegal?
Si cumple con una de estas reglas, no debería existir:
❌ No tiene un objetivo claro.
Si en la invitación pone cosas como «alinear ideas» o «ver avances», huye.
❌ Podría ser un email.
Si no hay debate ni decisiones que tomar, mándalo por escrito y deja de torturar a la gente.
❌ Participa demasiada gente.
Si hay más de 6 personas y no es un cumpleaños, es un desperdicio de tiempo.
❌ Se repite cada semana «por si acaso».
Reunión recurrente sin motivo real = asesinato de productividad.
Cómo decir NO sin quedar mal
Sabemos que no siempre puedes decir: «Mira, esto es una pérdida de tiempo, mejor no me invites».
Pero sí puedes usar estas estrategias:
👉 «¿Podemos resolver esto por email?» (Traducción: No quiero perder una hora en esto).
👉 «¿Cuál es el objetivo concreto de la reunión?» (Traducción: Si no lo tienes claro, no deberíamos estar aquí).
👉 «No puedo, pero dime lo que necesitas y te lo paso directamente.» (Traducción: No me apetece perder el tiempo con esto, pero te ayudo igual).
Tu tiempo es más valioso que una agenda llena
Si estás en reuniones todo el día, no estás trabajando.
Y si has pasado décadas en el mundo laboral, ya has visto suficientes reuniones absurdas como para seguir aceptándolas sin más.
Aprende a decir NO. Cuida tu tiempo. Y sobre todo, deja de sufrir reuniones que no sirven para nada.
La vida es demasiado corta como para pasarla en Zoom.
Te estás acordando de esa persona, ese compañero, exjefe o socio. Envíale este artículo para echarte una risas.
