Negocios millonarios como Wallapop, Airbnb o BlaBlaCar se basan en un modelo peer to peer (P2P). O dicho de otro modo, un modelo de negocio en el que se intercambian productos y/o servicios entre particulares gracias a un emprendedor que crea una plataforma para aunar la oferta y la demanda.
La ventaja para el emprendedor es que no tiene que desarrollar productos o servicios. Son los usuarios los que ponen su saber hacer. Pero es un modelo que tiene su complejidad. Aquí te ofrecemos seis ejemplos diferentes de emprendedores que basan su negocio en el intercambio, en algunos casos con ejemplos tan curiosos como piscinas de particulares o material audiovisual.
6 ejemplos de negocios ‘peer to peer’ para estudiar
Félix Martín Aguilar, CEO y cofundador de Aliqindoi, un marketplace para la venta de móviles y productos electrónicos entre particulares (C2C). Aliqindoi testea los terminales electrónicos que se venden, de forma remota, para garantizar la correcta condición y funcionamiento de estos dispositivos, y además automatiza la logística y los pagos eliminando la necesidad de encontrarse con un extraño.
Ahora también ofrecen su SaaS a comercios que quieran introducir la economía circular en sus canales. En 9 meses de vida ha movido un volumen de 100.000 terminales.
“La complejidad de los marketplaces radica en la necesidad de atraer a tu plataforma la oferta y la demanda al mismo tiempo. En este proceso de atracción de la demanda es esencial estructurar las actividades de adquisición de una forma segmentada y ordenada, formulando hipótesis de comportamiento de usuario (metodología lean startup), testeando y acotando el gasto. La metodología “spray and pray” (espolvorea y reza) no funciona aunque tengas millones que quemar; es necesario entender cada segmento y encontrar la fórmula de adquisición. Esta es la única forma de obtener métricas de forma sostenible, manteniendo un CAC razonable”.
Raphaëlle de Monteynard, cofundadora de Swimmy, una plataforma de alquiler de piscinas de particulares por horas o por días que cuenta con un catálogo de más de 6.000 piscinas disponibles en Francia y España para fiestas particulares o eventos de trabajo y más de 355.000 usuarios.
“En negocios peer to peer a menudo hay que hacer una labor de evangelización con los propietarios de los bienes que puedan convertirse en la base del negocio. Cuando lancé Swimmy en el año 2017, la idea de alquilar tu piscina no existía. Hoy disponemos de un catálogo con más de 6000 piscinas en nuestra web. Otro reto es fijar un precio adecuado. Nosotros empezamos con un precio por tarde/persona. A día de hoy es por hora/persona. Lo cierto es que resulta complicado satisfacer a todos los usuarios, pero hay que intentar buscar siempre lo mejor para todas las partes involucradas”.
Alexis Las Heras, CEO y cofundador de Lumio, una plataforma para compartir energía sostenible. Desarrollan comunidades para que personas con placas solares puedan compartir su energía con personas que no pueden instalarlas. Cuenta con más de 2.000 usuarios en la plataforma y ha realizado más de 700 instalaciones solares.
“Cuando entra en juego la compra-venta de energía, la clave es entender que el vendedor y comprador son personas completamente diferentes y con hábitos de consumo muy distintos. En nuestro caso, por el contrario, ha sido clave que las dos caras de este peer to peer ya se conocían. El vendedor de excedentes de energía es una persona con un poder adquisitivo alto, unos hábitos de consumo ya adaptados a la energía solar y con conocimiento de primera mano de cómo funciona esta misma. El comprador-consumidor de esta energía tiende a ser más joven, con motivaciones de ahorro y sostenibilidad y menor conocimiento del sector. Para ambos casos, este peer to peer solo tiene éxito si se trata de una plataforma fácil, transparente y accesible”.
Nacho Tejero, CEO y cofundador de Webel, una aplicación para contratar todo tipo de servicios para el hogar entre particulares: limpieza, cuidado de mascotas, clases particulares, servicios de belleza… Dispone de más de 200.000 usuarios en Madrid, Barcelona y Zaragoza.
“El sector servicios a domicilio es un sector muy complicado, por 3 motivos. Uno, los servicios no son homogéneos: un profesional puede hacer un día un buen servicio y al día siguiente, por cualquier motivo, no estar a la altura. Dos, la calidad del servicio es muy subjetiva: lo que puede ser el mejor peluquero para un cliente puede no serlo para otro. Y tres, la desintermediación: suelen ser servicios recurrentes y, o das valor a los usuarios, o se van por fuera de la plataforma para evitar pagar las comisiones. Dicho esto, es un sector con una cantidad de oferta y demanda muy grande y sin apenas competencia, por lo que si se es capaz de dar con la tecla que resuelva los puntos comentados arriba, la recompensa es increíblemente grande”.
Jorge Vázquez, CEO de Yendo, una aplicación para compartir planes y eventos de ocio que utilizan miles de personas para conocer gente de manera natural. También ayuda a los promotores de eventos a vender fácilmente más entradas, invirtiendo mucho menos en marketing.
“Si quieres convencer a dos desconocidos de que hagan algo juntos, lo más importante es construir confianza entre ellos. Tienes que usar mucho tu servicio para tener muy presentes todas las dudas que se les van a plantear a los usuarios antes, durante y después de su interacción. ¿Cómo vamos a reducir la incertidumbre? ¿Cómo vamos a incentivar la comunicación y la transparencia durante el proceso? Construyendo un servicio Peer to peer; las entrevistas a usuarios, la empatía y el uso continuo del producto son las mejores herramientas que hemos encontrado para seguir mejorando cada día”.
“En Yendo unimos personas que no se conocen para que hagan planes juntos. Hemos tenido que construir una serie de mecanismos y automatizaciones que inviten a la colaboración y fomenten la comunicación”.
Pol Amoedo Orriols, cofundador y CEO de Filmo, una aplicación para alquilar material audiovisual entre particulares y empresas de forma segura. Cuenta con más de 1.500 productos por valor de 3 millones de euros en material audiovisual.
“Lo más importante en el peer to peer es facilitar la comunicación y generar confianza entre los usuarios. Nosotros lo hicimos apostando por el producto y le dedicamos mucho tiempo para intentar salir al mercado con una plataforma ganadora. La aplicación debe transmitir confianza para generar una comunidad sólida y comprometida, clave en un modelo de negocio donde la recurrencia de los usuarios es vital”.